LO QUE TU GATO PIENSA DE TI

A diferencia de los perros, nuestros amigos felinos nos tratan como si fuéramos gatos, según John Bradshaw.  
Este artículo fue redactado por Christine Del ‘Amore, de la National Geographic.  
  

Desde que los gatos pusieron sus garras en nuestros corazones aproximadamente 9,500 años atrás, los humanos han tenido un asunto del corazón con los felinos. Hoy en día existen aproximadamente tres gatos por cada perro en todo del mundo. Pero aún hay mucho que no sabemos de nuestros amigos felinos – como por ejemplo, lo que piensan de sus dueños.
John Bradshaw trabaja como un experto en los comportamientos de los gatos en University of Bristol y es el autor del nuevo libro Cat Sense. Él ha observado a los gatos hace varios años y ha llegado a una conclusión muy fascinante: los gatos no nos comprenden como los perros.
Hace poco Bradshaw compartió algunos conocimientos con el National Geographic.  Ésta es su historia.

¿Cómo empezaste a estudiar los comportamientos de los gatos?
Los primeros 20 años de mi carrera yo estudié los comportamientos olfativos en los invertebrados. Siempre he estado fascinado por este otro mundo en que los animales viven- principalmente por el hedor-, el cual es el sentido principal de los perros. Debido a esto, al principio de los 1980s yo empecé a trabajar con los comportamientos de los perros. Después, muy rápidamente yo me fascine con los gatos, y cual es su idea del mundo en comparación con nuestra.

¿Qué haces en tus investigaciones?
Mucha observación- miro a grupos de gatos y veo cómo interactúan, deduciendo su estructura social. Yo veo a los gatos en sus comunidades libres y en los refugios de animales donde bastantes gatos están alojando juntos,  puedes ver los dinámicos e interesantes que son cuando nuevos gatos son introducidos.
También yo he hecho algunas cosas más manipuladores, como estudiar la manera en que los gatos juegan con sus juguetes, o poner a prueba sus comportamientos en horarios distintos del día. También observo las relaciones con sus dueños, a quienes yo entrevisto y realizo encuestas para descubrir cómo ellos perciben sus gatos.
¿Por qué concluiste que los gatos no nos entienden como los perros?
Se han hecho muchas investigaciones con los perros y como ellos se relacionan con las personas. Ahora es muy claro que los perros nos perciben muy distintos que a sí mismos: en el momento que ven a un hermano, cambian sus comportamientos. La manera en que un perro juega con un humano es completamente distinta a la manera que juega con un otro perro.
Todavía tenemos que descubrir algo de los comportamientos de los gatos que sugiere que tienen un lugar distinto donde nos ponen cuando están socializando con nosotros. Es obvio que ellos saben que nosotros somos más grandes que ellos, pero no parecen adaptar sus comportamientos en gran medida. Poner sus colas en el aire, frotar alrededor de nuestras piernas, sentarse a lado de nosotros y peinarse es exactamente lo que los gatos hacen con otro felino.

Yo he leído artículos en que tú has dicho que los gatos piensan de nosotros como gatos grandes y tontos. ¿Eso es acertado?
No. En el libro yo digo que los gatos se comportan con nosotros en una manera idéntica como se comportarían con otros gatos. Piensan que nosotros somos torpes: no muchos gatos se tropiezan y caen por culpa de los humanos, pero nosotros nos tropezamos por culpa de los gatos.
Pero no creo que piensen de nosotros como tontos e estúpidos, porque los gatos no se frotan con otro gato que es inferior a ellos.
¿Nosotros podemos descubrir de verdad lo qué los gatos piensan de nosotros?
Se necesitan hacer más investigaciones. No es un tema que ha recibido mucha atención. Los gatos no son salvajes, entonces los ecologistas pueden pensar que ‘no son animales’.
¿Qué cosa te ha sorprendido más durante tus investigaciones?
El estrés que muchos gatos pueden sentir pero lo que sus dueños no, y como afecta sus vidas mentales y su salud. A los gatos no siempre le agradan los otros gatos, y la gente no puede ver con la magnitud que esto puede estresarlos. Aparte de las visitas rutinarias, la razón más común de porque los gatos son llevados al veterinario es por las heridas recibidas en las peleas con otro gato.
Ha aumentado el número de gatos que misteriosamente ha contraído  dermatitis y cistitis y se está volviendo más obvio que estos problemas médicos empeoran por el estrés. Por ejemplo, la inflamación de la vejiga es conectada con las hormonas del estrés en la sangre.
Una solución es examinar el estilo de la vida social del gato, en lugar de darle muchos medicamentos. Por ejemplo, se puede asegurar que dos gatos que no se agradan viven en los lados contrarios de la casa. Usualmente el problema desaparece.
Tengo algunas preguntas escritas por los dueños de gatos en Facebook. ¿Primero, por qué un gato aullaría cuando está en casa solo?
Los gatos aprenden específicamente a como sus dueños reaccionan cuando hacen ruidos particulares. Entonces si un gato piensa, ‘Yo quiero que mi dueño venga’ hacen ruido para que esto pase. Usan enseñanzas directas. (Aprende en National Geographic’s Little Kitties for Big Cats initiative.)

¿Por qué algunos gatos tratan a un miembro de la familia humana distinto que a otro?
Son mucho más inteligente de lo que pensamos: aprenden como funcionan las personas. Ellos saben que miembro de la familia es más propenso a levantarse a las 4 a.m. y darles comida.
¿Por qué los gatos regalonean?
Usan el comportamiento que usaría con su madre, todos sus comportamientos que muestran son derivados en cierta manera a  la madre. El gatito aprende subir su cola, frotase con su madre, regalonear y ronronear. Las madres acicalan a sus gatitos.
Entonces, usan partes de los comportamientos que ya tienen en sus mentess para comunicarse con nosotros. No hay muchos comportamientos diferentes, pueden ser hasta seis.
¿Puede entrenar a los gatos?
Sí. Los gatos pueden aprender lo que no deberían hacer. Si tu gato ha desarrollado un hábito (puede ser de saltar a la mesa), hay maneras restringidas de evitarlo.
Podrías usar un juguete con resorte, entonces cuando el gato salta a una cosa, el juguete salta y al  gato no le gusta y se va abajo de la mesa. Otra estrategia bastante buena es usar una pistola de agua. Pero te debes asegurar que el gato no sepa que la tienes. Los gatos no perdonan, y cuando una persona le causa ansiedad o sufrimiento, se mantienen lejos de esta persona.

¿Qué quieres que los dueños sepan de sus gatos?
Tienen que reconocer que los gatos son animales sociables sólo hasta cierto punto, pero nunca serán como los perros. Mucha gente que tiene un gato decide que podría tener uno más, pensando que dos gatos seria el doble de diversión. Pero los gatos quizás no piensan lo mismo.
El mensaje simple que me gustaría decir es que si quieres más de un gato, hazlo con cuidado y debes estar preparado para dejarlo si esto no funciona. 


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Unknown

La vida es una cancion que se canta con maullidos.

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